Una cuestión práctica! Hace un ratito he estado hablando con una amiga también madre, sobre las compras que las madres hacemos durante nuestro embarazo, e incluso con el bebé ya en nuestros brazos, pensando en el bienestar y la facilidad de nuestro día a día. Pues realmente con el paso del tiempo y el uso de tanto chisme nos damos cuenta, al menos a mi me ha ocurrido y a ella también, que nos pasamos de chisme. Un ejemplo de ello para mi es la bañerita.
Al principio, bien es verdad que la bañera cambiador plegable es muy cómoda. Cuando es tan pequeñito, una bañera a la altura del adulto, donde tener cerca todo lo que hace falta a la hora del baño está estupendo, pero claro, cuando el pequeño ya se mueve y monta olas artificiales hay que buscar otro modo que moje menos. Pues bien, una se pone a buscar y claro, hay una amplia variedad. El otro día sin ir más lejos en una tienda estupenda de una gran marca, coincidía que yo ojeaba cositas con una chica embarazada que estaba viendo bañeras. Claro, una busca lo más adecuado, ergonomico, de materiales no agresivos y vaya, ...lo mejor para su bebe, pero a veces los precios son un poco disparatados. La dependienta de la tienda le aconsejaba llevarse una bañerita en concreto que costaba sobre 65 euros. Yo estuve a punto de decirle ( de forma pruedente cuando la dependiente se alejara un poco) que me había comprado una por 5 euros en una conocida tienda de muebles, que me estaba sirviendo estupendamente, pero realmente me iba a meter donde no me llamaban y tampoco sabe una con quien habla, así que decidí ser prudente y abstenerme. Que hubierais hecho en mi lugar?
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